¡Si has organizado un viaje express a Barcelona, no te preocupes!

Aquí te dejamos un itinerario para que puedas visitar la ciudad en dos días.

Día 1 en Barcelona

Después de un gran desayuno, vamos a comenzar nuestra visita por el Barrio Gótico y Catedral. Este barrio es de los más antiguos y con más historia por lo que nos va a ayudar a tener una primera maravillosa impresión de esta ciudad. Durante el recorrido, también podremos hacer una parada en las terrazas que conforman esta zona.

Seguiremos por la Plaza de Cataluña y Las Ramblas, ambos sitios de visita obligada en Barcelona. Dentro de Las Ramblas se encuentra el Mercado de La Boquería, uno de los más conocidos a nivel europeo. Se trata de un mercado que data del año 1836. Lo conforman más de 200 puestos que ofrecen una amplia variedad de productos de la cocina tradicional española, así como internacional. Sin duda, esta visita no pasará desapercibida a nuestros sentidos.

Al finalizar nuestro paseo por Las Ramblas, nos encontraremos con el antiguo puerto, un lugar muy agradable sin duda.

En el puerto tenemos también la visita al Centro Comercial Maremagnum, es un centro comercial muy característico con infinidad de tiendas, aunque lo más característico de este centro son sus maravillosas vistas al mar.

Aprovechando que nos encontramos en la zona del puerto, vamos a disfrutar de la gastronomía catalana en una de las muchas terrazas y bares que nos ofrece esa zona.

Día 2 en Barcelona

Despues de haber cogido la primera toma de contacto, vamos a continuar con nuestro segundo día en Barcelona.

Vamos a empezar por la puerta grande y vamos a visitar La Sagrada Familia, obra por excelencia de Gaudí que en la actualidad aun se encuentra en construcción. Si es nuestra primera vez en Barcelona, esta visita nos dejará totalmente impresionados.

A unos 20 minutos caminando, nos encontramos con otra joya de Gaudí, La Pedrera, también conocida como la Casa Milá, por el político Pere Milá que fue quien realizó el encargo a Gaudí. Contemplar su fachada es algo impresionante. Quizás, lo más característico de este monumento son sus azoteas, visita obligada, ya que nos ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad.

Despues de visitar estas dos joyas arquitectónicas, nos vamos a dirigir al Parque Güell, otra obra del arquitecto Gaudí. Se encuentra situado en la parte alta de la ciudad.

Fue inaugurado en 1922 y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984. Es una de las señas de identidad de esta ciudad y un lugar mágico para pasear. En él podemos apreciar una ampliar variedad de jardines y árboles con formas geométricas, mosaicos, dos casitas como sacadas de un cuento, además de un mirador que nos ofrece unas vistas preciosas de Barcelona.

Si sois valientes y os quedan tiempo y ganas, podéis seguir visitando zonas como el Barrio del Born, uno de los barrios con más encanto de Barcelona.